Huesca. Embalse de Valdabra. España en Bicicleta. asisomosen2012.com

Jose Luis se ha ido a trabajar y yo de exploración a ver la ciudad. Y a su alcaldesa. Pero ha sido imposible. 

Huesca tiene 52.000 habitantes con ligera pérdida, un 10% inmigración y un 15% de paro. Son gente abierta y amables, aunque tienen una cierta reticencia, la mayor hasta ahora, a aparecer en las fotos. En bicicleta, su casco antiguo, se recorre muy placenteramente y más cuando intentas descubrir la ciudad siguiendo tus pulsaciones.

En esa búsqueda dí con la historia de la Campana de Huesca. El Rey Ramiro II, el Monje, heredó el trono por la muerte de sus hermanos. Más, los nobles, se bufaban de él por ser monje, hasta entonces, en el Monasterio francés de San Ponce de Tomeras. Lo consideraban incapaz de gobernar y sus indisciplinas desestabilizaban el Reino. Entonces, el Rey, a consejo de su abad, dijo que iba a hacer una campana que resonaría en todo el reino. 

Manod llamar a los nobles más poderosos y, según iban entrando en al castillo, un verdugo los cortaba las cabezas. Con ellas, el Rey hizo un círculo y en el centro, colgó una de ellas, como si fuera el badajo. Todos los nobles con cabeza que quedaron, fueron fieles y obedientes al Monarca. José Casado del Aguisal, en mil ochocientos y pico, pinto un cuadro que lo escenifica. 

Tuve la buena fortuna de poder hacer algunas entrevistas más y de empaparme de la ciudad, que me gustó. Y las personas con las que traté, también. Sigue llamándome la atención su acento tan característico y veo que se me va a pegar, jajaja. 

Y, por la tarde, de nuevo excursión al campo con unos amigos, al Embalse de Valdabra, zona de paso de las grullas, allí y en la Sotonera. Será por la época, o por la luz, o por su entorno, pero es bonito. Había una casa, parece que abandonada, de piedra, integrada en el terreno. Su chimenea, los techos llenos de hollín, su construcción. Los establos y los doblaos para la paja. Vida pasada grabada en todos sus poros. Me meto en ellos y me abstraigo. Me sorprende la construcción con los medios de que disponían. Y lo pasamos genial hasta que empezó a anochecer, que volvimos, para ver perder, entre amigos, al Atlético de Bilbao, entre pizzas, chistes y tal. Buena noche y buena gente. Gracias.

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