Vilanova i l'Geltrú-Barcelona. 55 km.

Barcelona actuaba sobre mi como fin de etapa de una de las cuatro partes en que, mentalmente, he dividido mi viaje. Barcelona, A Coruña, Cádiz y Madrid.
Con cerca de 850 km recorridos, me siento pleno y feliz. Me gusta el trabajo como está quedando y me gusta el viaje como está siendo.
Salí de Vilanova muy bien informado por Slow (gracias) de la entrada en la Capital sin correr demasiados riesgos por las autovías. Pero antes, hice una parada en el faro de la localidad, que además tiene un pequeño y bonito museo. En él, hay una maqueta, elaborada a mano por un marinero que, por su cuenta, transcribió la realidad del fondo marino, con profundidades y otros datos, testados por él, a un tablero.
El tiempo era soleado y el aire entraba por la popa. Pero las pilas del gps dijeron basta y, de repente, me quedé ciego. Aunque estaba bien informado, agradezco la ayuda del aparatito. Tenía que encontrar pilas. Pregunté a una mujer que iba en bicicleta. Era francesa. Me dijo que no sabía pero que ella me las daba. Acto seguido, sacó la cámara de fotos del bolso, le quitó las pílas y me las dió. Además de otras dos de repuesto. Gracias. De nuevo con gps.
Quería llegar a comer a la ciudad, donde me esperaba un amigo. Me dediqué al pedal casi en exclusiva y fue un viaje razonablemente ligero, excepto en las cuestas de Garraf. Aquí, me encontré con una pareja de alemanes, Kerstin y Olaf, con sus bicicletas cargadas hasta las trancas. Fue una explosión de alegría para ambos y estuvimos dialogando un rato sobre los pormenores del viaje. Subimos las cuestas juntos entre el mar de coches y motos de un día de fiesta.
A partir de aquí, llegué a Barcelona con celeridad y me planté en la plaza de España en un pis pas. Aquí, llamé a mi amigo, con el que quedé para comer. Con las bicicletas, llegamos hasta la casa donde estoy instalado y donde decidiré mi próximo avance hacia el Pais Vasco.

Campamento

Faro de Vilanova

Así guardaban antes los marineros los cabos

niños-marineros  de la localidad con una ballena

Maqueta de los fondos marinos

Los viajeros Kerstin y Olaf

Playas cercanas a Garraf

Barcelona

Mis amigos Fernando y Ariadna, líandose unos cigarrillos mientras conversan