lunes, 2 de abril de 2012

Illana.


Otro día más en Illana para preparar la ruta a Cuenca, enviar correos de avanzadilla, que no me van a servir de nada, dado que hoy es sábado, y subir a internet todo lo que tenía pendiente, que era bastante. Lo primero que hice, cuando hube desmontado el campamento base,fue ir en busca de la batería de la cámara que, el día anterior, había perdido cuando Rocinante se tumbó en la cuneta. Tuve la gran fortuna de encontrarla, entre los matojos de hierbas y con ella, volví al pueblo para visitar la Iglesia y ponerme a la faena informática. Entre unas cosas y otras, se me fue la mañana y volvía a comer invitado por el ayuntamiento (gracias, de nuevo), con Jose Miguel, propietario de la fábrica de harinas y con quien mantuve una animada charla que nos tuvo hasta las 5 de la tarde, dándole al pico.
Después, de nuevo a la biblioteca, mi lugar de trabajo, donde entre señoras mayores y chavales, acabé todo lo pendiente escuchando y riendo y filosofando con las historias y ocurrencias de los presentes. Muchas gracias a Ruth, siempre pendiente de mis necesidades y de facilitarme todo cuantos necesité, incluido algún dato. 
Y a eso de las 19,45, a comprar la cena y el desayuno, a montar la tienda en el frontón, de nuevo y a dormir para mañana acercarme a Huete, próxima parada.


2 comentarios:

  1. jajaja.... que cachonda la foto.....

    ResponderEliminar
  2. La foto muy buena, aunque la pintada del fondo es, por lo menos, inquietante. Sigue con tu aventura, ánimo.

    ResponderEliminar

Por favor, se respetuoso en tus comentarios. Gracias.